Hoy en día, cualquier aficionado a tomar fotografías debajo del agua lo tiene bastante fácil. De hecho, smartphones como el reciente Moto G 2015 o Samsung Galaxy S5 ya se pueden sumergir sin ningún tipo de problemas. Asimismo, también existen las llamadas cámaras de acción, las cuales suelen ser diminutas, sumergibles y resistentes a golpes.
Sin embargo, realizar fotografías acuáticas no siempre fue tan fácil como lo es utilizando una GoPro. Un ejemplo de ello es la imagen superior, la cual es considerada como la primera instantánea capturada debajo del agua. Fue tomada en 1899 a una profundidad de 50 metros, para lo que se requirió un tiempo de exposición de unos 30 minutos.
Su autor fue el francés Louis Boutan, uno de los primeros en experimentar cómo se podía sumergir una cámara y que ésta resistiese condiciones extremas sin volverse defectuosa. No obstante, esa pasión por fotografiar bajo el agua se encontraba justificada, ya que Louis Boutan fue un biólogo principalmente interesado en las especies marinas.
Poco a poco, Louis Boutan fue mejorando su técnica. Por ejemplo, empezó a utilizar un flash para tomar las fotografías, algo que le permitiría reducir de forma considerable el tiempo de exposición para que la imagen pudiese ser contemplada de forma correcta.
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